Habitualmente, las personas que sufren humedades se preguntan cuál es la mejor época del año para acabar con los problemas de humedades. Si bien es cierto que cada una de las estaciones tiene unas características, la verdad es que reparar las humedades en otoño es una opción tan buena como cualquier otra. A continuación, te damos algunas razones para que te decidas.
El invierno está llegando
El lema que popularizó la serie Juego de Tronos, “Winter is coming”, nos viene que ni pintado a estas alturas del año. ¿Te imaginas lo que es vivir un invierno, ya de por sí bastante frío en algunas regiones de nuestro país, con problemas de humedades? Repararlas va a lograr mejorar la calidad de vida general de nuestro hogar. Un resfriado, una gripe, una alergia al polvo… todas esas enfermedades van a empeorar si tenemos humedades en casa así que, ¿por qué no atajarlas cuanto antes?
Ahorrarás dinero de la calefacción
Es uno de los clásicos remedios caseros antihumedad que no funcionan. Básicamente, cuando tenemos humedades en casa vamos a notar el ambiente mucho más frío. Lo lógico cuando tenemos frío es subir la calefacción, ¿verdad? El problema es que las humedades no desaparecen al realizar esta acción, de modo que van a seguir dañando nuestra casa y nuestra salud. Mientras tanto, gastaremos mucha más energía intentando caldear el inmueble, lo que va a traducirse en un gasto de dinero cada vez mayor.
No, subir la calefacción solo nos va a traer problemas. Sin embargo, si contamos con especialistas que logren identificar cuál es exactamente el problema de humedades que tenemos en casa, podrán eliminarlas de manera efectiva. Así, la calefacción volverá a funcionar al rendimiento necesario para un invierno normal, en lugar de estar forzándola para que trabaje más de la cuenta y nos haga un agujero en la cartera.
Repáralas en cuanto las veas, no importa la época del año
Esta es la razón principal que te debería hacer pensar que los problemas de humedades que tienen en casa deben ser reparados en otoño. Si nos hemos dado cuenta ahora, ¿por qué esperar más? Si dejamos que progresen, las humedades solo van a ir a peor, con todo lo que eso conlleva: adiós a la pintura de casa, hola al moho, a los ácaros del polvo, a los bichos de la humedad y, con todos ellos, vendrán los problemas de salud. No hay ninguna forma de que una humedad mejore con el tiempo, es sencillamente imposible que si no actuamos nosotros, se arreglen solas.
¡No lo dudes! Al primer signo de humedades en casa (respiras peor, ha salido una mancha, huele a húmedo…) llama a un especialista para que le eche un buen vistazo al problema. Condensación, infiltraciones, capilaridad… dependiendo de la tipología, las humedades deben afrontarse de un modo u otro. Si este otoño has notado que tienes este inconveniente en casa, lo mejor es que te pongas manos a la obra cuanto antes y confíes en profesionales