La humedad excesiva en el interior de nuestras casas mejora las condiciones de reproducción y permanencia de insectos, bacterias, ácaros y todo tipo de microorganismos que pueden resultar perjudiciales para nuestra salud, pues nacen y se alimentan de los hongos y las bacterias que produce la humedad.
Las condiciones de insalubridad que se generan con esta humedad ambiental extrema, suelen producirse con más frecuencia en las épocas de invierno, por la cantidad de lluvias y el frío. Los síntomas más frecuentes de la existencia de estos problemas de humedad, suelen ser la aparición de manchas negras en las paredes y techos de cualquiera de las estancias de nuestras viviendas y los malos olores y, esto a su vez, es lo que crea el mejor entorno para la proliferación de todo tipo de microbios y gérmenes que tan dañinos resultan para las personas que conviven en esta situación.
El nivel de infestación de nuestros hogares a causa de las humedades, puede llegar a provocar el desarrollo o empeoramiento de muchas enfermedades graves, como son las alergias, dermatitis, asma, artritis, rinitis, fibromialgias u otras dolencias de tipo reumático. Por eso es tan importante mantener nuestras casas libres y limpias de humedades.
Por todo ello, Murprotec, especialistas en el tratamiento y diagnóstico de las humedades estructurales, recomienda siempre vigilar nuestro hogar y, si existe alguna mancha de moho u otro síntoma de humedad, recurrir a un experto para que diagnostique el tipo de humedad existente y pueda poner un tratamiento adecuado con el que erradicarlo definitivamente, porque es nuestra salud la que está en juego.