No son pocas las familias que tienen una mascota entre sus miembros. Un perro, un gato o, incluso, una iguana pueden tener un lugar en el hogar tan privilegiado como cualquiera de sus demás habitantes humanos. Pero, ¿alguna vez os habéis preguntado si la humedad afecta por igual a hombres que animales? Sabemos que la convivencia con un problema de humedad estructural no es fácil para quienes sufren problemas respiratorios como alergia o asma. La proliferación de moho a causa del aumento notablemente del nivel de humedad ambiental dentro del edificio puede agravar los síntomas de los pacientes alérgicos, por ejemplo. Ahora bien, ¿tiene el moho consecuencias sobre los perros?
Sí. Los perros que viven en un lugar demasiado húmedo tienen una alta probabilidad de padecer problemas en la piel. La raza que más sufre complicaciones de esta índole es la de pelo largo, ya que la humedad facilita que la piel se irrite provocando un gran picor. Una señal a través de la que se puede detectar si el animal está pasando por estas molestias cutáneas es ver cómo se rasca a menudo con la boca o las uñas. A veces, incluso, llegan a hacerse daño y causar infecciones provocada por hongos o bacterias.
Otro inconveniente que la humedad puede causa a los perros es un problema al oído. De hecho, un nivel de humedad muy alto provoca, sobre todo en razas con orejas largas, una producción de cerumen demasiado elevada que causa un picor muy fuerte; y, así como hace con la piel, el perro va rascándose hasta lesionar el propio oído o introducir en el oído bacterias y hongos que pueden generar infecciones, dolorosas y mal olientes en la mayoría de los casos.
El mal olor, típico en algunos perros, también puede ser proveniente de un exceso de humedad; pues ésta puede producir una grasa como protección para la piel del perro que conlleva un olor muy fuerte y desagradable.
Y es que la humedad estructural va más allá de los cimientos y muros de la construcción. Por eso, es tan importante reparar este problema, cuanto antes mejor. Esto no significa esconder las manchas negras de los muros con una pintura antihumedad o situar un deshumidificador en la habitación. La solución verdadera y definitiva viene de manos de un equipo de profesionales como el de Murprotec, que acudirá tu casa y sin obras la dejará perfecta y habitable para cualquier inquilino.