Una vez más, la calefacción y el frío afectan negativamente a nuestro organismo. En esta ocasión nos referimos a la deshidratación que provoca los cambios bruscos de temperatura en esta época del año. Salir de casa y sentir como el frío de la mañana nos cala en cada hueso de nuestro cuerpo; una sensación que se esfuma al entrar en el metro, que a ciertas horas del día más bien parece algún lugar caribeño por las altas temperaturas que se alcanzan en las vías subterráneas. Lo mismo se repite al entrar o salir de la oficina, al pasar por el supermercado o, simplemente, estando en casa. En definitiva, cambios de temperatura repentinos, a lo que hay que sumar el exceso o carencia de humedad. El resultado: piel reseca.
En esta época del año notamos como nuestra cara nos pide hidratación extra, de la misma manera que lo hacen nuestras manos, continuamente inmersas en crema –al menos, así deberían estar-. Y cómo no, la deshidratación trae consigo daños colaterales como la aparición de grietas o eccemas. Para evitar que esto ocurra, en Murprotec se nos ocurren algunas soluciones relacionadas con nuestro campo de trabajo: la humedad.
En este sentido, no nos cansaremos de repetir los daños que este problema estructural de las construcciones tienen sobre la salud de los humanos. Por sorprendente que pudiera parecer, el exceso de humedad no sólo debilita los cimientos y muros de la vivienda o afea la estética del hogar, así como reduce el bienestar en él; además, un nivel alto de agua contenida en el aire empeora los dolores provenientes de enfermedades reumáticas y los síntomas de dolencias respiratorias. Eso lo hemos dicho muchas veces, pero no se queda ahí. El efecto de un ambiente cargado de humedad sobre la salud también afecta al cuerpo de forma superficial, como es en este caso la deshidratación de la piel. Para mejorar este, y el resto de consecuencias derivados de un problema de humedad estructural, los expertos antihumedad de Murprotec aconsejan diagnosticar y aplicar cuando antes el mejor tratamiento contra los altos niveles de humedad en el hogar. Muchos problemas desaparecerían.
Por otro lado, mientras nos decidimos a utilizar los servicios de Murprotec, aquí os dejamos algunas recomendaciones para mantener nuestra piel hidratada que tienen más que ver con nuestro día a día:
– Mantener hidratado el interior es la mejor forma de hidratar el exterior: bebe abundante agua.
– Eliminar las células muertas de la piel para promover su propia salud: exfóliate una vez a la semana.
– Bajar la temperatura del agua de las duchas, ya que el agua demasiado caliente acaba eliminando los aceites de la piel: dúchate con agua templada.
– Utilizar crema hidratante después de la ducha el baño: mantén siempre la piel hidratada con crema. También los labios.
– Dormir las horas necesarias: tus células también necesitan respirar.
– Evitar la exposición al viento y al frío: utiliza guantes, gorro y bufanda.
– Reducir el consumo de bebidas con cafeína.
Con estos consejos y el buen hacer de Murprotec eliminando humedades estructurales en el hogar, nuestra piel permanecerá brillante y tersa.