Grandes y pequeños -las fechas navideñas no entienden de edad- ya están escribiendo su carta a las Reyes Magos, o a Papa Nöel. Más los grandes, que los pequeños, además estarán planificando los gastos del mes. A las habituales facturas de suministros, alquileres, comida y transporte, en diciembre hay que sumar regalos, comidas y viajes. Materializar ilusiones no es gratis, aunque es cierto que no tiene precio ver la cara de quien ha visto su deseo cumplido. No obstante, más de uno tenemos que hacer encaje de bolillos para que nuestras cuentas no empiecen el año con un déficit exagerado. Los menos previsores estarán temiendo por ver cómo su bolsillo acaba temblando tras estos días de fiesta.
Así que como aún estamos a tiempo, para los que se dejan llevar y dejan que el espíritu navideño les invada, sin pensar en los disgustos posteriores que esto pueda acarrearnos, os traemos unos consejos prácticos para que la cuesta de enero sea menos complicada.
Según el informe realizado por Deloitte ‘Navidades 2013: ¿Recuperando la ilusión?, este año gastaremos algo más que en 2012. De media, 671 euros. Una cantidad nada despreciable teniendo en cuenta la multitud de hogares cuyos ingresos ni se acercan a esa cifra. Dicho esto, para los que tengamos que apretarnos el cinturón, sin renunciar a la Navidad, ahí van algunas buenas prácticas a tener en cuenta:
– Lo imprescindible y primordial, hay que comparar precios. No vale ser perezosos y comprar a la primera.
– En segundo lugar, y en relación con lo primero, Internet es un fantástico canal de compra que nos permite, además, comprar precios si movernos de casa.
– Para los que les guste disfrutar de las comidas de estas fechas, ¡no hay que dejar las compras para última hora! Siendo previsores podemos ahorrarnos un gran pico en el pescado, la carne y el marisco propio de estas fechas.
– Los hay que no pueden evitar participar de la Lotería Nacional. Es difícil resistirse al pensar que puede tocarle al de la mesa de al lado y a ti no. Para éstos, mejor compartir los gastos. De cualquier forma, si tocara, no está demás que le toque también a nuestros amigos.
Para terminar estos consejos, otros que tienen más que ver con el trabajo de Murprotec y las facturas mensuales que no entienden de fechas especiales. Lo idílico es pasar la Navidad en familia, entre amigos y al calor de la chimenea. Pero la realidad es que son los menos los que pueden presumir de comer turrón frente a la hoguera. Para esta mayoría, ¡ojo con la calefacción! Mejor optimizar el calor que sumar a los gastos extra navideños una factura extra también.
A la hora de optimizar la energía de la calefacción es fundamental comprobar que las ventanas y puertas cierran correctamente, así no tendremos ninguna fuga de calor. Ahora bien, tan importante como el escapa del calor es la entrada de frío. Por ello, es igual de importante asegurar que no hay corrientes de aire en nuestra casa. Corrientes capaces de bajar la temperatura unos grados en aquellas habitaciones con problemas de humedad. Porque sí, la presencia de humedad en los cimientos y muros de la vivienda provoca frío y, por consiguiente, un derroche de calefacción.