Tutankamón es uno de los personajes más relevantes de la cultura egipcia. Grandes revelaciones y misterios nos han llevado a conocer partes de la vida del mítico regente y su pueblo. Pero no solo son grandes vivencias las que suceden alrededor del faraón egipcio.
Recientes estudios han detectado en la tumba de Tutankamón unas sospechosas manchas. Los investigadores tratan de dilucidar si es un problema de humedades o algo más mundano proveniente de los habitantes del mausoleo.
En una investigación arqueológica de ese calibre, encontrar un problema de humedades seria un gran contratiempo y, a buen seguro, los investigadores tomaran las medidas correctivas y preventivas necesarias.
Las manchas oscuras en la base de paredes o muebles pueden ser un síntoma claro de un problema de humedades
Las condiciones climatológicas, el uso cotidiano del hogar o las costumbres habituales pueden alterar las condiciones de humedad de nuestra vivienda. Detectar un problema de humedades incipiente no es sencillo, pero podemos fijarnos en algunos pequeños síntomas habituales.
Los primeros que podemos detectar, y que pueden suponer un futuro problema de humedades, son pequeños núcleos de condensación, sobre todo en baños y cocinas, que tardan más de lo normal en retirarse. Si detectas que el espejo del baño o la pila de la cocina tardan en evacuar el vaho, puede que se esté gestando un núcleo de condensación no deseado.
Del mismo modo, podemos detectar humedades si localizamos abombamientos en la pintura de la vivienda. Normalmente es más habitual encontrar esos desperfectos cerca del suelo o de los techos. Esto nos puede indicar que puede haber un problema de pérdida de agua o un problema de humedades por capilaridad o filtración lateral.
También es posible que nos encontremos con manchas oscuras en paredes o techos. Podemos darnos de bruces con estas manchas en lugares menos habituales, como trasteros, garajes o altos de armarios. En estos casos podemos guiarnos también por el olor o la sensación de humedad ambiental.
En todos estos casos el primer paso debe ser la prevención y el control. Si detectamos que la condensación, los desperfectos en la pintura o las indeseables manchas van en aumento, estaremos en presencia de un problema de humedades.
No todos los problemas de humedades requieren la misma solución
Tendemos a buscar una solución fácil, que en la mayoría de casos solo servirá para ocultar el problema y no solucionarlo de manera definitiva. No podemos olvidar que las humedades son un síntoma de la falta de salud e higiene de nuestro hogar y que ponemos en juego nuestra salud y confort.
Los profesionales en el tratamiento contra las humedades siempre recomiendan utilizar soluciones y sistemas que ataquen al origen del problema. Los parches y las “soluciones milagrosas” solo sirven para mitigar la sensación de malestar y en último término sirven para que malgastemos nuestro tiempo y dinero.
Recurrir a profesionales no solo eliminará el problema de raíz, si no que te permitirá disfrutar de tu hogar.
Al igual que los arqueólogos de la tumba de Tutankamón, no te la juegues con lo que realmente importa.