El moho es el conjunto de hongos microscópicos que forman parte de nuestro medio ambiente natural, y tienen una labor fundamental al descomponer la materia orgánica y reconvertirla en otras formas de materia.
Una característica básica es que crece en cualquier época del año siempre que existan condiciones de humedad. Se propaga mediante esporas que son muy resistentes, sobreviviendo a situaciones ambientales poco favorables.
El moho en sí mismo no es un problema. La preocupación viene dada cuando dejamos que se forme en la estructura de nuestros hogares, donde las esporas y otros derivados de su desarrollo, pueden afectar tanto a nuestra salud como a la integridad estructural del edificio.
Algo positivo del crecimiento el moho, es que es muy fácilmente reconocible ya que se descubre como un conjunto de manchas y lo podremos percibir con un característico olor a humedad (tierra mojada). Si nos percatamos de alguno de estos síntomas, cuidado, porque puede haber riesgo para nuestra salud.
Por otro lado, tenemos la humedad, generada en el interior de nuestras casas tanto por los ocupantes y sus actividades como por diversos problemas, que son los que desarrollarán la humedad excesiva, y por tanto tendremos que detectar y dar una solución definitiva con la ayuda de los mejores profesionales.
Por tanto, la combinación de las humedades interiores excesivas debido diferentes situaciones con la preferencia de los mohos a desarrollarse en ambientes de este tipo da como consecuencia el crecimiento exponencial de los hongos.
Como ya hemos comentado, el moho crece en lugares con mucha humedad, fundamentalmente, en baños, cocinas, sótanos y en otras estancias con problemas de filtraciones de agua (condensación ) y en lugares donde existe una ventilación deficiente.
Además, crece fácilmente en productos de papel, de cartón, en las tejas del techo y en productos de madera. El moho también puede crecer en el polvo, las pinturas, el tapiz de la pared, los materiales aislantes, los muros, las alfombras, las telas y los tapices de los muebles.
Y juntos, son uno de los grandes enemigos para nuestra salud:
- En las vías respiratorias causan tos, irritación, congestión nasal, estornudos, dificultad respiratoria….
- En cuanto a las alergias respiratorias nos brindan enfermedades como rinitis, alveolitis, bronquitis, asma……
- También podemos mostrar síntomas no vinculados con el sistema respiratorio tales como irritación de ojos, lesiones e infecciones en la piel, así como diferentes tipos de alergias cutáneas.
Por tanto, y conociendo la relación tan estrecha entre la humedad y el moho, tendremos que tratar de eliminar los problemas que provocan todos estos efectos negativos de raíz, y qué mejor que hacerlo apoyándonos en grandes profesionales, que ya conocen en profundidad hasta donde puede llegar este vínculo tan dañino.