“No puedes pasar” sería la respuesta perfecta para que el bueno de Gandalf acabase con nuestro problema de humedades. Pero, por desgracia, la magia no existe cuando se trata de mantener al agua, y a las humedades, a raya.
No podemos luchar contra problemas como las lluvias copiosas típicas de Septiembre (a mediados de este Septiembre se llegaron a registrar 370 litros por metro cuadrado en algunos puntos de Alicante, ¡en una sola noche!). Tampoco está en nuestra mano decidir el agua que es capaz de absorber la tierra que limita con nuestros hogares y, mucho menos, decirle al agua dónde se puede meter. Es el principal problema de las humedades por filtraciones laterales: la presión del agua. Cuando la cantidad de líquido supera la capacidad de retención de la tierra, empieza a atravesar los materiales que tiene a su alrededor. Por eso es vital que tengamos nuestras plantas bajas, sótanos y garajes a prueba de inundaciones.
Pero puede que feas manchas negra, restos de salitre o pequeñas inundaciones aparezcan en algunos de estos lugares. Son los primeros síntomas de que tenemos un problema de humedades por filtraciones laterales. También podemos saberlo si tenemos electrodomésticos que no funcionan correctamente (es muy habitual que en sótanos tengamos la lavadora) o si nos encontramos con desperfectos en la pintura. Una vez que las humedades están en tu casa, solo hay una forma de acabar con ellas: eliminando su origen.
En el mercado hay infinidad de falsas soluciones definitivas: pinturas, placas de pladur, máquinas e incluso materiales antihumedad. Las pinturas anti humedad son una panacea que se vende muy bien. Sí, tapan las manchas e incluso puede enmascarar el olor. Pero no tienen ningún medio para eliminar las humedades de techos y paredes. Con las placas de pladur antihumedad hay que tener más cuidado. Algunas de estas placas se comercializan con ese nombre y no ofrecen aislamiento contra el agua. Y las que sí lo hacen tienen un límite. Deshumidificadores, bolas anti humedad o cámaras bufas son sistemas que pueden aplicarse a zonas concretas. Pero, otra vez, no eliminan el origen de las humedades. Incluso se llegan a comercializar materiales con alta resistencia a las filtraciones laterales o la capilaridad. Si tienes manchas de humedad en casa, ya tienes el problema dentro. No pongas parches.
La buena noticia es que existen métodos, para eliminar el origen de las humedades, sin gastarse mucho dinero y sin obras faraónicas. En Murprotec disponemos de tratamientos que eliminan las humedades, atacan directamente a su origen y, además, ventilan y sanean el aire que respiras. Es muy importante acabar con la fuente de las humedades, pero también lo es respirar un aire sano que evite afecciones pulmonares o las molestas alergias y resfriados.