“El final del otoño suele coincidir con un incremento de la sensación de frío y un descenso de la humedad, dos condiciones que provocan un agravamiento de la dermatitis atópica y la dermatitis seborreica. Se trata de las dos patologías más frecuentes en las consultas de dermatología, y cursan con enrojecimiento, descamación y un molesto picor de intensidad variable. (…)Dentro de esta familia de enfermedades dermatológicas, la dermatitis atópica es la más frecuente, ya que se estima que afecta al 15 por ciento de la población. Conocida popularmente como ‘piel atópica’, suele aparecer en personas que tienen alguna de las enfermedades llamadas atópicas –asma y rinitis alérgica– y en un 80 por ciento de los casos se manifiesta muy pronto, antes de los siete años de edad.” (Fuente: Europa Press)
El exceso de humedad en el hogar facilita la proliferación y desarrollo de hongos, ácaros y bacterias que pueden agravar las enfermedades, tanto de tipo respiratorio como de la piel. Es el caso de la dermatitis, afecciones en la piel que empeoran, al igual que las alergias y las infecciones pulmonares, con la presencia de microorganismos, más numerosos en hogares con problemas de humedades.
Las consecuencias de las humedades estructurales en las construcciones son muy diversas y peligrosas. Si no se eliminan a tiempo, desde la fortaleza de los cimentos y muros, hasta las pinturas y revestimientos pueden deteriorarse a causa de este problema. La humedad va afectando poco a poco a las viviendas hasta llegar a suponer un verdadero peligro y riesgo para los edificios y las personas que allí habitan.
En este sentido, las humedades pueden perjudicar a la salud de las personas, agravando o haciendo aparecer enfermedades de tipo respiratorio, reumático o de la piel. Así que, debido a la humedad contenida en el aire puede aumentar la sensación de malestar, escalofríos, cansancio, dificultad al respirar, pies fríos, dolor de cabeza, malos olores, etc. Por ello, resulta tan importante mantener las viviendas libres de problemas de humedades.
Para evitar el empeoramiento de nuestra salud, además de todos los efectos negativos que la humedad puede tener sobre las construcciones, hay que contar con el diagnóstico y los tratamientos de especialistas en quitar la humedad estructural. En este sector destaca como líder en España y Europa Murprotec, una empresa especializa en tratamientos contra la humedad que cuenta con más de cincuenta años de experiencia y el apoyo de numerosos profesionales de la construcción y la arquitectura, quienes avalan sus eficaces y definitivas soluciones antihumedad.