A todos se nos ha pasado en algún momento por la cabeza. Encontrarnos con una pequeña mancha de humedad y decir… “esto lo soluciono yo en un momento“.
Y es en ese momento, y solo en ese preciso momento, cuando comenzamos a experimentar el inicio de todos nuestros futuros problemas. Ya que da igual si se trata de humedades por condensación, filtraciones laterales o capilaridad. Los remedios caseros nunca funcionarán a largo plazo contra los problemas de humedades.
Porque no existe una solución a coste 0€ que pueda satisfacer las necesidades de cada tipo de humedad ni hogar. Porque cada situación es diferente y cada problema debe resolverse específicamente por profesionales que sepan realizar un diagnóstico correcto. Ya que en el origen de nuestros problemas, también encontraremos la solución.
Pero… ¿cuáles son los remedios caseros antihumedad que NO funcionan y que tenemos al alcance de la mano?
- Ventilar bien. Este consejo suele aparecer no tanto cuando ya tenemos las humedades en casa sino como idea para evitarlas. Aunque tiene su lógica, no nos va a servir para nada en el momento en el que las humedades se hayan instalado en nuestro hogar, pues no va a solucionar el problema.
- Disminuir la humedad que se produce en casa. Este consejo nos pone en una difícil solución: si nuestras humedades aparecen en cuanto usamos la ducha o cocinamos un par de veces… ¿deberíamos dejar de ducharnos y cocinar? Este consejo es solo un parche que no va al fondo de la cuestión.
- Separar los muebles de las paredes. Este consejo intenta evitar que la humedad de las paredes cale y llegue a los sofás, a los sillones y los armarios. El problema es que no todos podemos hacerlo. Además, no debemos dejar que las humedades condicionen el modo en el que vivios. Es mucho mejor ir a por ellas y eliminarlas de una vez por todas.
- Sales antihumedad. Otro clásico de los remedios caseros, que supone un coste adicional (hay que comprar las sales), y que por supuesto, no puede llegar a solucionar un problema de una habitación completa, ya que solo se enfoca a pequeñas estancias.
Como muchas veces hemos visto, una vivienda con humedades se devalúa y además, aumenta considerablemente su gasto energético.
Por todo esto, cuanto más esperemos en buscar una solución definitiva y más tiempo dediquemos a inútiles remedios, más se propagarán las humedades y por tanto, empeorará nuestra situación.
Es mejor que trates directamente con los profesionales antihumedades, que te darán todas las garantías en cuanto a trato, diagnóstico y efectividad a la hora de aplicar el método más acertado para acabar con tus humedades, sin pasar por la pérdida de tiempo y dinero que suponen los métodos caseros.
Deja de invertir en soluciones caseras, que únicamente suponen un parche al problema real. Busca profesionales que te ofrezcan una solución real y definitiva, y si además te ofrecen una garantía de hasta 30 años… mucho mejor.