Tener una buena calidad del aire es sinónimo de tener una buena calidad de vida. Es por ello que debemos tener la información en nuestras manos para poder utilizarla en nuestro favor.
Hoy te queremos hablar de cómo medir la calidad del aire en casa de una manera sencilla y efectiva que te ayudará a saber cuándo tienes que pasar a la acción.
¿Qué parámetros determinan la calidad del Aire Interior?
Para poder medir la calidad del aire interior es indispensable conocer qué parámetros son los que determinan la calidad del aire en tu casa.
Según la normativa, se clasifican en físicos (por ejemplo, la temperatura); químicos (como el polvo en suspensión) o biológicos (como el moho y los ácaros).
Lo que quiere decir que una buena calidad del aire conlleva un control de la temperatura interior, de su humedad relativa y un control de los contaminantes que están presentes en el aire.
Vamos a ver algunos de ellos.
El dióxido de carbono
Seguro que has echado en falta a uno de los protagonistas que siempre están presentes cuando se habla de contaminación ambiental.
Hace relativamente poco que la concentración de CO2 se incorporó en la verificación de la calidad del aire porque se ha convertido en un claro indicador del funcionamiento del sistema de renovación de aire.
Por sí solo, el CO2 no es un contaminante, pero sí es cierto que cuando se alcanza una alta concentración es tóxico para todos.
El gas radón
Se trata de un contaminante de origen natural y que resulta radiactivo cuando se acumula en espacios interiores.
Lo que significa que aumenta el riesgo de cáncer de pulmón para sus ocupantes.
Y vigilar su presencia en las viviendas es prioritario y casi obligatorio.
Al final, para controlar la calidad del aire dentro de casa es importante mantener a raya todos estos contaminantes que se desprenden de materiales de construcción o del propio uso de productos como los de higiene y limpieza.
Sensores para medir la calidad del aire interior
Hoy en día, por suerte, contamos con el avance de la tecnología de nuestro lado para controlar y medir la calidad del aire de nuestra vivienda.
Para ello existen diferentes sensores que pueden ayudar a conseguir este fin.
Entre los más utilizados te puedes encontrar:
- Los sensores de CO2. Como su propio nombre indica, se utilizan para medir el gas de dióxido de carbono. Y lo más normal es que estos sensores basen su funcionamiento en el principio de absorción de energía de los compuestos de una determinada longitud de onda.
- Los sensores concentración de VOC. Los VOC (también llamados Compuestos Orgánicos Volátiles) son sustancias químicas que contienen carbono y se encuentran normalmente en elementos vivos que se convierten en vapores o gases.
- Los sensores de PM 2.5. Evalúan las partículas finas en suspensión. El origen de estas partículas es muy diverso y puede crear problemas respiratorios y enfermedades cardiovasculares.
- Los sensores de humedad (o termohigrómetros) se encargan de medir la temperatura y la humedad relativa de un lugar concreto.
Cómo mejorar la calidad del aire en casa
Ya que tienes los instrumentos y los conocimientos para comprender qué partículas son las más dañinas para tu salud y la de los tuyos, ha llegado el momento de medir.
¿Y qué ocurre si la calidad del aire de tu hogar es bastante mala?
Pues que deberemos tratar de mejorarla con todo lo que esté en nuestras manos. Por suerte, puedes hacerlo siguiendo unas pequeñas rutinas.
Controla las fuentes contaminantes
De esta manera, la calidad del aire de tu hogar se mantendrá lo más sana posible. Para ello, por ejemplo, puedes reducir el uso de la estufa que usas para calentar tu casa.
¿Para qué sirve este pequeño acto?
Así evitaríamos que las emisiones contaminantes se concentren y tengan un efecto dañino en personas más vulnerables como ancianos, niños y mujeres embarazadas.
Si también tienes una cocina de gas, para tratar de mejorar la calidad del aire, lo ideal es abrir las ventanas mientras se utiliza. Así conseguirás que las emisiones salgan al exterior.
Ventila tu hogar
Esta pequeña acción puede marcar un antes y un después en la calidad del aire de tu casa.
Una buena ventilación es indispensable para que las emisiones contaminantes se marchen de nuestro hogar y no se concentren en zonas específicas.
Abre las ventanas y las puertas de tu casa al menos durante veinte minutos al día para que se regenere el aire y llegue a todos los rincones del hogar.
No utilices fragancias artificiales
Muchas de estas fragancias contienen químicos tóxicos para las personas y los animales, por lo que su uso puede contribuir a tener una mala calidad del aire interior.
En su lugar, busca maneras de utilizar fragancias naturales que no contengan químicos.
Confía en expertos para cuidar de la calidad del aire de tu hogar
En Murprotec ponemos a tu disposición la última generación para averiguar en qué estado se encuentra tu hogar.
Olvídate de tratar de comprender los parámetros y crear gastos con aparatos que pueden ser más complejos de lo que parecen desde fuera.
Te ofrecemos un diagnóstico gratuito para que averigües en qué situación está tu hogar y así poder ponerle fin a uno de los mayores problemas que tenemos en casa.
Nuestro equipo analizará la situación de tu hogar, certificará la nivel de calidad del aire y si esta es deficiente te propondremos alguna solución como nuestra Central de Tratamiento de Aire.
Se trata de la mejor herramienta que existe para asegurar que el aire en un hogar es adecuado para la salud de las personas que viven en su interior y que no conlleva ningún tipo de riesgo.