Ahora que se presentan de un modo continuo esas lluvias tan características y necesarias de invierno, pueden comenzar a aparecer ciertos problemas relacionados con las humedades existentes como las filtraciones laterales.
Este tipo de inconvenientes, pueden convertirse en graves problemas tanto para decenas de edificios, como para los propietarios que en ellos habitan.
Las filtraciones de agua ocurren por un paso lateral del agua desde zonas colindantes a nuestra vivienda, siendo los sótanos, bodegas y garajes, zonas de bajo rasante, las afectadas habitualmente.
Los síntomas de un problema de filtraciones pueden ser aparición de manchas de humedad, moho o salitre, y también podemos detectarlo por desconchones en la pintura de las paredes o incluso por pequeñas inundaciones.
La acumulación de agua en el suelo puede ser abundante, de tal modo que atraviese el aislamiento con facilidad y acceda a zonas de la estructura del edificio, haciendo que la integridad de éste se vea dañada debido a la degradación continua a la que el agua somete a los componentes tales como el hormigón, ladrillo o incluso vigas y metal.
Por tanto, sus problemas pueden ser muy variados, desde inundaciones, hasta el deterioro de revestimientos o la aparición de manchas de humedad y salitre en la pared.
Aplicando soluciones temporales como pinturas antihumedad, se agrava esta situación, porque no solucionan el problema de raíz, sino que proporcionan una falsa situación de bienestar que oculta el origen real de la situación que estamos viviendo.
El problema más grave, sin embargo, es uno que no podemos ver a simple vista y que muchas veces puede incluso no ser prevenido por el aislamiento. El agua filtrada, degrada lentamente los materiales de construcción por los que pasa (ladrillos, hormigón, morteros…), e incluso, la armadura de forjados, vigas y pilares pueden llegar a oxidarse. Por tanto, si no damos con una solución definitiva a tiempo, la estructura completa del edificio puede llegar a peligrar.
Resumiendo, ¿cuáles son los problemas más habituales que podemos sufrir si padecemos este tipo de humedades?:
- Aumento de la factura entre un 15 y un 30%
- Daños variados en la instalación eléctrica
- Daños en muebles y objetos.
- Manchas de humedad en paredes (salitre)
- Inundaciones en zonas bajas de la vivienda.
- Daños en los aparatos eléctricos y demás objetos en contacto con el agua.
- Deterioro del edificio ya que el agua se acumula en el interior del material de construcción.
Por tanto, es importante estar atentos en épocas de lluvias abundantes, como la actual, de las primeras presencias de alguno de estos problemas, para poder encontrar una solución a tiempo, definitiva y eficaz que nos evite preocupaciones y dolores de cabeza innecesarios.