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A nuestros pulmones no les gusta dormir con plumas

Si levantarse de la cama al toque del despertador es uno de los momentos más complicados del día, más difícil resulta poner los pies en el suelo cuando estamos al abrigo del edredón, que parece que nos abraza gracias a las plumas mullidas que lo rellenan. Una sensación muy acogedora y cálida que parece, sin embargo, ser la causa de algún que otro problema pulmonar.

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Un grupo de investigadores catalanes ha determinado a través de una investigación que una de las principales causas del desarrollo de la fibrosis pulmonar idiopática se encuentra en la exposición continua a las almohadas y edredones de plumas en nuestro día a día. De igual forma, los estudios realizados en el Hospital Universitario Vall d’Hebron también atribuyen parte de la culpa a la presencia de hongos y aves en los ambientes en los que se mueven las personas que presentan esta patología.

La fibrosis pulmonar idiopática es una enfermedad que hace que los pulmones se vuelvan rígidos al cicatricarse, haciendo la respiración cada vez más difícil. En nuestro país se calcula que alrededor de 10.000 personas sufren este padecimiento. Hasta ahora no se conocían las causas de su contagio, se creía que era provocado por una reacción ante una sustancia desconocida o lesión. Gracias a este grupo de investigadores catalanes conocemos mejor esta grave enfermedad que debilita la capacidad respiratoria progresivamente. Por lo que a partir de este hallazgo se empezará a trabajar en su curación de una forma más certera.

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Parece, por tanto, que las plumas no son una buena compañía en la cama, al menos para aquellos a cuyos pulmones les cueste respirar. No obstante, no hay que olvidarse de las aves y los hongos, otros de los motivos que agravan esta enfermedad, y otras tantas relacionadas con los bronquios o los pulmones. En este sentido, hay que tener especial cuidado con la proliferación de este tipo de organismo, que ni son plantas ni animales, en casa, ya que son también peligrosos para los alérgicos, los bebés o personas con problemas respiratorios.

Una de las principales causas de la formación de colonias de hongos en casa es la acumulación de humedad en demasía. Una habitación en la que el vapor de agua impregna los techos o el interior de un mueble que se apoya sobre un muro por el que asciende el agua del suelo sin freno son algunos de los orígenes de la aparición de estos organismos, tan nocivos para nuestros pulmones.

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