Durante todo este 2020 todos nosotros hemos sido conscientes de la importancia que tiene cuidar de la calidad del aire en un hogar.
Con todo el tema de la pandemia nos hemos vuelto mucho más conscientes de que muchas veces respiramos aire que puede ser dañino para nosotros.
Así que por fin —de una vez por todas—, hemos empezado a tomar en serio las recomendaciones para respirar un buen aire en casa.
Sin embargo, cuando pensamos en la calidad del aire de un hogar muchas veces no tenemos en mente a algunos de los integrantes más importantes de nuestras familias:
Tu mascota.
¿Es peligroso exponerles a una mala calidad del aire?
Sigue leyendo y descubre todas las posibilidades.
Una mala calidad del aire pone en peligro a tu mascota
Parecen invencibles, ¿verdad?
Cuando cada día ves a tu perro o a tu gato dando saltos por casa con tanta energía y alegría, piensas que jamás puede pasarles nada malo.
No, de hecho, vas mucho más allá de pensarlo. La realidad es que deseas y harías cualquier cosa porque no fuera así.
Pero al final del día, esta es la verdad. Están respirando el mismo aire que tú. Así que lo mismo que a ti puede dañarte, también sucede con ellos.
De hecho, existen muchos estudios que afirman que ellos son todavía más delicados ante determinadas sustancias que nosotros:
- Sus pulmones son más pequeños.
- Respiran a un ritmo mucho más acelerado.
- Su actividad en casa multiplica a la nuestra.
Si la calidad del aire es deficiente, están en un grave peligro.
Y no sé tú, pero todos los que tenemos mascota en el equipo de Murprotec haríamos todo lo que pudiéramos para cuidar su salud.
¿Qué sustancias nocivas para tu mascota puede haber en una vivienda?
¡La lista es muy larga! Y todas ellas dañan la calidad del aire de nuestro hogar para poner en peligro a tu mascota.
Toma nota…
- Formaldehído de la pintura, estantes, gabinetes, camas, plásticos, cosméticos, telas, almohadas y cortinas.
- VOCs, o compuestos orgánicos volátiles, de la pintura, pesticidas, materiales para la construcción y pasatiempos, limpiadores y para ebanistería.
- Plomo de la pintura vieja (¿sabías que al abrir una ventana con pintura vieja, podría liberarse en el aire?).
- Virus y bacterias que se transportan a través del aire, provenientes de humanos, mascotas, superficies húmedas y sistemas de ventilación.
- Sustancias químicas retardantes de llamas de muebles, alfombras y colchones.
- Fragancias y otras sustancias químicas de velas, aerosoles sintéticos para habitación, aromatizantes para tapicería, y productos para limpieza y lavandería.
- Moho, hongos y otros contaminantes de plomería defectuosa, así como cimientos y techos con filtraciones.
- Caspa y alérgenos de mascotas y otros animales.
- Humo de tabaco, incluyendo humo de segunda y tercera mano.
Como te decíamos más arriba, la mayoría de estas sustancias las respiramos a diario y no nos damos cuenta de lo potencialmente peligrosas que pueden llegar a ser.
Sin embargo, tanto ellos como nosotros estamos expuestos a dañarnos.
¿Cómo afectan estas sustancias a tu mascota?
El Hospital Veterinario de la Universidad Nacional de Taiwán se encargó de investigarlo.
Estudiaron a 121 perros y 81 gatos con enfermedades respiratorias durante un año.
Encuestaron a los dueños con los tipos de contaminantes presentes en el hogar (inciensos, pinturas, gases de la cocina…).
Además utilizaron un monitor de calidad de aire para obtener una muestra de las partículas encontradas en las zonas que más frecuentaba el animal.
¿El resultado?:
- El 73 % de las afecciones respiratorias venían de la exposición al humo que produce la cocina.
- El 33 % del tabaco.
- El 17 % del uso de inciensos.
- Y el 12 % por el uso de productos químicos.
Los diagnósticos más comunes en perros
en esta investigación fueron:
- La enfermedad del tracto respiratorio inferior.
- El colapso traqueal.
- La enfermedad de las vías respiratorias superiores.
Mientras que en los gatos…
- Enfermedad de las vías respiratorias superiores e inferiores.
- Neumonía.
No solo afecta a tu mascota
Nos estamos centrando en hablarte de lo que afecta a tu mascota, pero no pienses que tú estás libre de enfermedades.
La mayoría de estas sustancias son una amenaza para la salud de todos los integrantes del hogar.
¿Sabes por qué?
Porque a algunas de estas toxinas, como el formaldehído; ciertos compuestos orgánicos volátiles y retardantes de llamas se las conoce por causar trastornos metabólicos y endocrinos y, también, posiblemente cáncer.
¿Has usado alguna vez aromatizantes, velas o inciensos?
Asegúrate de qué componentes llevan, porque algunos de estos productos contienen ftalatos, sustancias químicas potencialmente dañinas que han demostrado que causan anormalidades hormonales en mamíferos, defectos de nacimiento y problemas reproductivos.
Además, estos ftalatos no están solo en los productos con perfume, también están en algunos juguetes para niños y para perros que se importan de China, esmaltes de uñas y perfumes.
Cuando estas sustancias se liberan en el aire, los ftalatos llegan vía aérea y pueden ser inhalados o absorbidos por la piel.
En ambos casos, terminan en el torrente sanguíneo de tu mascota.
¿Nuestra recomendación en este caso? Elige con prudencia qué productos entran en tu casa.
¿Y esto cómo se soluciona?
No te preocupes, estás a tiempo de mejorar la calidad del aire de tu hogar.
Nuestras recomendaciones son:
- Ventila la casa todos los días.
- Dale vida a tu hogar con plantas en el interior.
- Evita las fragancias artificiales.
- Olvídate de fumar en casa.
- Deshazte de los alérgenos.
Eso sí, ten en cuenta que estos pequeños pasos te ayudarán a mejorar la calidad del aire, pero si ya cuentas con humedades y moho, que son unas de los principales causantes de enfermedades, no los quitará.
En ese caso siempre te recomendamos acudir a profesionales.
Y en Murprotect puedes pedir tu diagnóstico gratuito para saber cómo terminar de una vez por todas con los causantes de muchos males.
